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Krishna - Amar al Avatar es amar a Dios

Krishna - Amar al Avatar es amar a Dios

Krishna

Parte 3

Amar al Avatar es amar a Dios

El Bhagavad Gita señala cuál fue la primera vez que Krishna declaró su condición de Avatar. La declaración pública de Meher Baba ocurrió en 1953 con motivo del cumpleaños de Zoroastro. El momento de la declaración pública fue cuidadosamente planificado:

Parece ser que la declaración pública del avatar acerca de su condición como el avatar es un evento importante en su trabajo, y que hay algo divinamente ordenado en ese momento en que él lo declara, en cada advenimiento. Krishna se permitió ser aceptado por los vaqueros como un amiguito con los que jugaba, por las gopis como un compañero, por sus súbditos como un rey, y por algunos como el Señor, pero no fue hasta la batalla de Kurukshetra que él reveló a Arjuna su Forma Universal y dio al mundo sus enseñanzas, que el Bhagavad Gita recopila, y que declaran que él es el Avatar.16

Krishna, como Jesús y Meher Baba, a diferencia de Buda y de Mahoma, estableció la vía del amor a Dios en su forma personal como la vía espiritual más directa.

La vía que los aspirantes espirituales deben utilizar según un Avatar en particular pierde su potencia con el tiempo pero eso no le ocurre siempre a todos. Baba explicó que San Francisco no solamente amó a Jesús como debería ser amado sino que alcanzó la meta última de la Realización de Dios aunque otro Avatar (y otra religión en el mundo) intervino entre Jesús y San Francisco. Baba contó con gran admiración la anécdota de Mira:

Todos la conocen en India. La gente entona los bhajans que ella cantaba alabando a Krishna. Mira fue una muchacha bellísima. Fue esposa de un príncipe de la realeza, perteneciente a una acaudalada familia del norte de India, quien posteriormente llegó a ser rey. Ella amaba a Krishna con todo su corazón, pero no vivió en la época de Krishna; éste vivió cinco mil años antes. Mira vivió hace unos trescientos años. A su esposo no le gustaba la manera con que ella andaba por las calles, pues era la reina, y las reinas no se mezclan con la muchedumbre. Entraba en las chozas de los pobres con el nombre de Krishna en sus labios mientras cantaba. Sufrió muchas dificultades y amenazas para poner a prueba su amor a Krishna. La encerraron en una habitación, le envenenaron la comida y le escondieron una cobra en un ramo de flores. Lo aceptó todo como un obsequio de su Señor Krishna, y no le sucedió nada. Krishna la protegió. Se negó a tener nada que ver con persona alguna, con excepción de Krishna. 

Finalmente el rey la mandó al exilio. Ella dijo: “Tengo un lugar si el rey me expulsa. Pero no tengo un lugar si el Señor del universo está descontento”. Entonces el pueblo se volvió contra ella.

A medida que pasaban los años se la veía radiante con sus harapos. Entonces el rey fue a verla y se prosternó. En India es un pecado que un hombre se prosterne ante una mujer, y eso es imperdonable para su esposa. Sin embargo, él se prosternó ante ella porque era sincera. Cuando Mira murió, todos la reverenciaron, y el pueblo repite los bhajans de ella.

Yo soy Krishna. Quiero que todos ustedes me amen como Mira me amó.17

En otra ocasión Baba comentó esto: “Mira no nació en la época en la que Krishna se manifestó como el Avatar en forma humana. Incluso entonces el amor de ella superó al de las gopis. En este sentido, el amor de Mira es único y no tiene paralelo. Puede decirse lo mismo sobre el amor que Francisco de Asís sentía por Jesucristo. No había visto físicamente a Jesús pero el amor que sentía por Cristo superaba al de Pedro, la ‘Piedra’. Debido a que Francisco nunca se encontró con Jesús, su anhelo y su amor fueron mucho mayores.”18

Los que aman a un Avatar en particular y tratan sinceramente de seguir sus enseñanzas creen frecuentemente que no es posible amar al Avatar con tanta intensidad como ocurría cuando el Avatar estaba “en el cuerpo” y trabajando en el mundo. Baba aclara que nada está más alejado de la verdad. El Avatar nunca muere; vive eternamente en el corazón de todos. Duerme en los corazones de quienes no tienen interés en él. Espera en los corazones de los que lo aman. Baba dice que, en este advenimiento, no vino a enseñar sino a despertar. Amar al Avatar no es poca cosa, aun así no se puede aspirar a nada más elevado que amarlo.

Baba ha comentado con lujo de detalle la historia y las enseñanzas del Bhagavad Gita y con claridad el legado central del advenimiento de Krishna. Puesto que Baba es quien nos dió el Bhagavad Gita, sus comentarios son siempre iluminadores.

En 1939, cuando la humanidad estaba sumida en la Segunda Guerra Mundial, Meher Baba recordó el consejo que Krishna le dio a Arjuna, explicando una vez más que era oportuno luchar y que, en última instancia, la guerra se había producido por voluntad de Dios:

Yo, siendo Krishna, le ordené a Arjuna que matara. Siendo Cristo, le dije a Pedro que ofreciera la otra mejilla para que la abofetearan, pero la verdad latente en ambos casos es la misma. ¿No ha cambiado la gente desde entonces? No, la gente no es avanzada, pero ha cambiado.

El mundo está ahora retornando a su actitud de barbarie, y así una y otra vez, son los cambios en la vida. Pero lo que Krishna enseña en el Bhagavad Gita es divino; llega hasta lo más profundo. El Bhagavad Gita dice que ustedes pueden llegar a ser Dios si me aman, me siguen, y se entregan a mí. No hay otra manera. Los discípulos deben hacer lo que el Maestro les ordena: no deben imitar. Arjuna levantó de buena gana su arco y obedeció, sabiendo y conociendo perfectamente que no estaba matando. Con desapego tuvo que hacerlo, por el bien espiritual de ellos, sin deseo ni obligación de matar, para efectuar el trabajo de Krishna simplemente desapegándose.

Si eres un perfecto partidario de la no-violencia, juras que no harías daño a ninguna criatura. Sin embargo si vieras que un perro está matando a tres gatos, ¿qué harías? ¿Matarías al perro? Si te hicieras a un lado, permitirías que el perro matara a los tres gatos. ¿Qué harías tú, Elizabeth? Si te quedas callada, propicias la muerte de tres gatos. Si matas al perro, eres violenta.

Hay un tigre y un rebaño, y tienes en tu casa un fusil que, sin embargo, no tocas porque juraste no ser violento. Sabes que puedes matar al tigre y salvar al rebaño. ¿Qué harías? Mata al tigre, pero desapegándote: esto es lo que Krishna enseña. No seas partidario de la violencia ni de la no-violencia; sólo desapégate. Debes matar por el bien del rebaño. En el caso de Arjuna, fue por el bien espiritual de los otros, quienes eran como tigres lujuriosos y codiciosos.

¿Es correcto ir a la guerra? Ve a la guerra si te llaman y no puedes evitarlo, pero no luches con ánimo de matar. Solamente ayuda y mata con desapego, o muere sin miedo ni ira hacia el que te mate. Pocos, poquísimos son capaces de hacerlo. ¿Por qué quiero la guerra? Para hacer las cosas como corresponde de acuerdo al progreso y avance espiritual.19

Sería un error considerar que el Bhagavad Gita establece para todos los tiempos estas espirituales “reglas de la guerra”. Baba hizo este comentario en 1940:

Dadabhoy Navoy puso en marcha el Congreso en 1810. Después Gandhi llegó a ser el líder durante los pasados veinte años. Los furiosos disturbios de Chauri Chara estallaron hace nueve años. Gandhi cree que si te abofetean una mejilla tienes que ofrecer la otra. Piensa que eso pondrá fin a las guerras. ¡Pero eso es sin-violencia y sinsentido!

El Mahasabha (un reaccionario grupo político hindú) dice que hay que aplicar el Bhagavad Gita y actuar como Krishna lo declaró: defenderse, pero sin odio. Ahora bien, ¡eso no es práctico porque el odio alemán es tan profundo que la reacción de todos los defensores deberá ser de odio!

Tanto la enseñanza de Krishna, por la que el Mahasabha abogaba, como la enseñanza de Cristo, por la que Gandhi abogaba, son poco viables para esta guerra. ¿Qué hicieron las pequeñas naciones? ¡No ofrecieron resistencia y fueron devoradas! Y ahora odian más que aquellas que ofrecieron resistencia.

Y ahora llegará un tercero y nuevo modo de procurar la paz mundial. Primero, la guerra mundial, y después la paz mundial.20

La clave del Bhagavad Gita no está en la actitud de desapego ni en los diversos ejercicios espirituales que Krishna debate, sino en la obediencia a Krishna:

Aunque todo el universo es ilusión, sin embargo se rige por una ley, una ley terminante; y esa ley se ocupa de cada detalle. No podemos eludir la ley del karma. Pero cuando trascendemos la ilusión, la ley no nos ata más.

Krishna le dijo lo mismo a Arjuna: “¡Mata a tus parientes! ¡Mata a tus amigos!” en la batalla de Kurukshetra. Ustedes deben haber oído hablar de la famosa batalla. Arjuna  se negó a hacerlo, diciendo: “¿Cómo podré matar a mis parientes y amigos?” Entonces Krishna declaró: “Yo estoy por encima de la Ley. Toda la Creación proviene de mí, y tú no estarás atado [por la ley del karma].”21

El error de Krishna consistió en mostrarle a Arjuna la forma universal de Dios

Uno de los más sensacionales acontecimientos descriptos en el Bhagavad Gita es el de Krishna cuando revela Su forma universal a Arjuna a pedido de éste. Podría inferirse que Dios les va a dar “experiencias” o “poderes” espirituales a quienes se consagran a un Avatar o que estas experiencias son una condición sine qua non para consagrarse al Avatar. Esta conclusión sería errónea. Un hombre que no estaba convencido le sugirió a Meher Baba que sería capaz convencerse si pudiera experimentar lo que Arjuna experimentó. Meher Baba replicó: “Cuando yo era Krishna, fue nada menos que una debilidad de mi parte haber convencido a Arjuna de que yo era divino revelándole mi identidad como Paramatma mediante el darshan de Vishwaswarup [la revelación del cuerpo universal].”22

 Meher Baba es el primer Avatar en explicar que el Avatar siempre tiene un acto de debilidad o comete un error durante su advenimiento. Como Baba lo explica, el error de Krishna fue haberle mostrado el cuerpo universal a Arjuna. Baba reflexionó: “Cuando yo era Krishna le revelé a Arjuna mi Aspecto Universal. Esto fue un error. Yo no debería haberlo hecho, porque el amor y la fe solos deberían hacer que uno obedeciera las órdenes del Maestro. Arjuna no hizo esto y, para infundirle confianza, yo, como Krishna, tuve que revelarle algo.”23 Un problema creado por el error de Krishna es que los aspirantes espirituales probablemente se crean con derecho a tener “experiencias” espirituales o que verdaderamente no se comprometerán con el Avatar cuando no cuenten con tal experiencia. Baba hizo este comentario: “Por sí sola, cualquier experiencia, pequeña o grande, en última instancia equivale a nada si se la compara con la Realización de Dios. Algunos amantes de Occidente, que me consideran Dios encarnado, me escriben sobre sus experiencias fuera de lo común, pero esas experiencias tampoco tienen realmente importancia. Aunque es alentador tener experiencias, es muy peligroso atribuirles mucha importancia o complacerse en ellas.”24

Meher Baba vinculó la debilidad de Arjuna con su propia debilidad: “Muy pocos aman ardientemente y de verdad. Cuando este amor comienza, no traten de extinguirlo. Hasta mi Arjuna fracasó a causa de su debilidad, lo cual me obligó a darle la experiencia [del Cuerpo Universal]. Se lo puede llamar mi debilidad porque le di la experiencia que a Arjuna le permitió cumplir mis órdenes.”25 El problema de Arjuna fue que su comprensión del Avatar era imperfecta y, por ende, su fe en el Avatar era inadecuada: “A partir de este episodio [Krishna revelando su cuerpo universal a Arjuna], ustedes llegarán a saber que hasta los discípulos más cercanos de un Maestro entienden mal su trabajo. Para convencerlos y crear fe en ellos, los Maestros tienen que recurrir a la realización de milagros. Por ese motivo Krishna hizo lo que hizo.”26

Nosotros no podemos entender al Avatar

Con nuestros limitados intelectos no podemos esperar ni deberíamos esperar que entendiéramos al Infinito: “Entender la Realidad infinita y eterna no es la META de los seres individualizados en la Ilusión de la Creación, porque la Realidad nunca puede ser entendida; debe ser realizada mediante la experiencia consciente.”27 Arjuna esperaba comprender las razones y orígenes de la guerra pero lo único que consiguió fue confundirse y abatirse. Krishna proporcionó tanto entendimiento en el Bhagavad Gita como Arjuna (y la humanidad encarnada por Arjuna) necesitaba, pero después de convencerse del elevado estatus del Avatar, Arjuna necesitaba creer que Dios había producido, por sus propias razones, los acontecimientos e incluso la guerra misma:

Mi trabajo como el Avatar concierne a todo el universo. No se reduce a mezquinos conceptos relacionados con beneficios espirituales individuales después de atenerse al dictado de teorías individuales. No depende de normas, prácticas o resoluciones que hayan sido fijadas. Mi trabajo es en una escala más grande y más vasta que la de Krishna. ¡Krishna le ordenó a Arjuna que matara a sus propios parientes! ¿Una cosa como esta puede depender de algún principio? Krishna lo ordenó por el bien supremo, y Arjuna cumplió su orden. Pero, como Krishna, quiero algún sacrificio.28

Dios tiene sus razones para que las cosas, e incluso la guerra, ocurran. No hay una manera con la que Él pueda explicarnos totalmente esas razones; sólo vamos a saberlas cuando nos fundamos con Dios. Por ejemplo, Baba dio esta explicación: “Krishna le probó a Arjuna, que era su devoto, que el hecho de que él (Krishna) produjera la aniquilación física y mental de los despiadados Kauravas era para la salvación espiritual de éstos. La salvación podría ponerse de manifiesto matando o salvando, de conformidad con lo que la situación exigiera espiritualmente.”29 El Avatar encuentra una manera de hacer que los acontecimientos del tiempo y del lugar de su advenimiento se conviertan en un medio para guiar a la gente hacia él: “Si Krishna no hubiera producido la guerra, no habría dado el Bhagavad Gita, porque todos estaban con ánimo de luchar. Si él hubiera dicho: ‘No luchen’, nadie lo habría escuchado.  Cuando dijo: ‘¡Luchen!’, introdujo en el mundo el verdadero significado de la Verdad”.30 El Avatar no solamente utilizó la batalla de Kurukshetra para brindar un contexto dramático a su mensaje espiritual para la humanidad sino que el conflicto y la guerra resultante fueron, desde su punto de vista, un reflejo del “divino sentido del humor del Avatar”, por asombroso que parezca.31

16. Bal Natu, Glimpses of the God-Man, Tomo V (Myrtle Beach, Carolina del Sur: Sheriar Press, 1987), página 77.

17. Lord  Meher
, 5432.

18. Lord  Meher
, 5851.

19. Lord  Meher
, 2434.

20. Lord  Meher
, 2615.

21. Meher Baba como se lo cita en Lord Meher, 5017. 

22. Lord  Meher
, 5177.

23. Lord  Meher
, 3993.

24. Lord  Meher
, 5177.

25. Lord  Meher, 4284.


26. Meher Baba como se lo cita en Lord Meher, 1798.

27. Meher Baba, God Speaks, 190 (en negrita en el original).

28. Meher Baba como se lo cita en Lord Meher, 3317.

29. Discourses
, 81.

30. Meher Baba como se lo cita en The God-Man, 134.

31. Así lo caracterizó Meher Baba según se lo cita en Lord Meher, 3935.