Cuando “despiertas”, encuentras que el gran Sueño que contenía todos los variados aspectos ilusorios del sueño, se ha desvanecido para siempre. Tanto el cielo como el infierno, como los planos, se desvanecen en tu interior para permanecer como nada. En este estado “despierto” no hay posibilidad para nada además de ti, el Yo, la Existencia eterna e infinita. Ésta es la única Experiencia que merece ser experimentada y anhelada. Para ganar esta Experiencia tienes que llegar a ser como el polvo a los pies del Maestro Perfecto, lo cual equivale a convertirse en nada. Y cuando llegas a ser absolutamente nada te conviertes en Todo. Una vez que Yo despierto en tu corazón, también despertarás para siempre.
Éste es mi trabajo como Dios, el de despertar a la humanidad a la inviolable unidad e inalienable divinidad de toda la vida. Debes saber que eres eterno en esencia y eres el heredero del Conocimiento, Dicha y Poder infinitos.